O Electo
En un hipotético tiempo, en una supuesta situación, por un dieras azares de la aritmética parlamentaria y de las coyunturas políticas... un candidato a Presidente de la Xunta consiguió su propósito, la grande meta de su vida. El día de la toma de posesión, a punto de dar el discurso de investidura, aparece un atranco inesperado: un extraño y achabacano tic nervioso amenaza con ridiculizar, o mismo arruinar, tan solemne y esperado momento. Alarmado, reclama asistencia médica.